El Faro de Isqueria - Fedra Egea

¿Qué minicosos?

¿Preparados para una nueva reseña?

Que sí, que ya sé que os tengo muy mal cuidados y hace tiempo que no os subo nada de este estilo, 

pero tenéis que entenderme.

¡Estaba con los finales!

¡Y ahora con SELECTIVIDAD!

(Sí, en mayúsculas porque esa palabra pesa mucho y da mucho miedo a los pre-universitarios)

Bueno, que me enrollo...

Pues hoy os traigo la reseña de la segunda obra que compone la saga de Fedra Egea ''Los secretos de la magia'': EL FARO DE INSQUERIA

AUTOR: Fedra Egea

TÍTULO: El Faro de Isqueria #2

SAGA: Los secretos de la magia

EDITORIAL: Espasa

Nº DE PÁGINAS: 416

SINOPSIS: ¿Por qué no funciona el faro mágico de Isqueria, en los confines del reino de Vekion?
Las comunicaciones se han interrumpido y un hechizo impide que los barcos se aproximen a sus costas. Solo queda una ruta para que un mago pueda ir a repararlo: por tierra, atravesando un vasto territorio dominado por los temibles Arqueros Negros del ejército agrio y transitado por peligrosas tribus nómadas.
Aunque no puede revelar el porqué, esto no es un problema para el joven ingeniero Djertan Rivotnyuk; ha perdido la memoria y no recuerda su pasado...o al menos eso es lo que todo el mundo cree.

1.- EL LIBRO DEL PODER

2.- EL FARO DE ISQUERIA

MI HISTORIA CON ÉL:

Como podréis ver es la ''segunda parte'' de la saga Los secretos de la magia, y lo digo entre comillas porque realmente es un libro que aunque está ambientado en el mismo mundillo y en la misma franja temporal, poco o nada tiene que ver con la primera parte.
En un principio esta idea no me atraía nada, porque yo quería un poco más de la trama que tanto me había enamorado, y porque mi experiencia con este tipo de libros no ha sido muy...¿prolifera?
Total, que el libro me lo tuvieron que prestar muy amablemente porque en la biblioteca donde encontré su primera parte no tenían este.

MI OPINIÓN:

Empecemos fuerte: digamos, por redondear, que el 1/4 de libro me resultó un somero coñazo. La historia era densa, y larga, y sosa, y lenta, y...fff, creía que no acabaría nunca. Pero luego pasas ese inicio y todo se llena de emoción, y aventuras, y magia, y peleas, y secretos y finalmente llegas sin aliento al final de la historia y te quedas como: ¿ya? ¿no hay más? ¡quiero más!
Por una parte me atrae este tipo de libros, porque eres incapaz de despegarte de él, pero por otra, te toca sopesar el libro, y de nuevo, necesita una mejor distribución, porque al principio casi te tienes que obligar a continuar con él y casi te pierdes una historia increíble.

A pesar de todo esto me sentí cómoda con el libro y oye, el cameo de los protas del primer ejemplar me dejó muy satisfecha, después de esa desilusión al enterarme de que no continuaba su historia.

Por cierto: ¡¡¡UUUUH!!! La de sorpresas que nos traen.

Ya está, ya lo he dicho.

Esta segunda entrega nos trae la misma magia, emoción y aventuras que pudimos observar en la primera parte de la saga. Sin duda, un libro imprescindible para todos los enamorados del primero.

En el tema personajes no he tenido nunca, en todo el libro, un personaje predilecto, pues todos han sido bastante fieles a la realidad, con sus defectos y manías, por lo que he adorado tremendamente aspectos de todos ellos: como la inocencia de Djertan o la inteligencia de Favuar.

¡ANTES DE QUE SE ME OLVIDE!

Me encanta la forma de escribir de Fedra, su forma de dejar entrever, de cambiar el punto de vista de un personaje a otro en la narración, las descripciones, todo. Me ha llamado muchísimo y ciertamente me ha incentivado a continuar leyendo en esos momento de cansancio que comentaba en el inicio.

Va, una vez dicho esto sigo con lo que iba...

Sensación de agobio, me ahogaba entre tantas sospechas o la escasa demostración de afecto, teniendo en cuenta que durante toda la historia el hilo conductor era el compromiso, el amor y el matrimonio.

En la misma línea de edición que la primera entrega, mi nota para este libro es de un:

Nacida en Almería y de madre griega, Fedra Egea mantiene un contacto intenso con Grecia, donde veranea todos los años desde su niñez y reside parte de su familia. Estudió en Francia hasta los dieciocho años, tras lo cual se licenció en Derecho por la Universidad del País Vasco. Siente una gran pasión por el arte italiano, especialmente por la música, y por Italia en general, país al que viaja con frecuencia. Ha trabajado en el campo de los recursos humanos y en el área de juventud, mayores y discapacitados de una organización sindical. También ha sido traductora de francés freelance. Vive en un cortijo a pocos kilómetros de Almería y ha llegado a tener más de veinte gatos. Con Espasa ha publicado El Libro del Poder (2008) y El Faro de Isqueria (2009).